Pagine di quotidiani e riviste dedicate a Giacomo Matteotti - 1925-1974

Vii ANIVERSARIO vocacion a la guerra y ha buscado dc asumir la dirccci6n cle un nucleo de descontentos, a quien ha ofrecido su apoyo cqntra el tratado de Versailles. En 1931 mando al diablo a los holcheviques, a los turcos y a los nacionalistas alcmanes y se ha puesto a cantar loas a la paz corno el Hon. Briand. Hace, deshace, dice, niega; se contradice a cada paso. En una sola cosa es constante: en sacrificar a la demàgogià de su jefe los intereses clc la naci6n. • • • Con -este balance pasivo se explica la profunda crisis interna que men- ~ionan todos los observadores imparciales de las cosas italianas y los mismos fascistas. Es un hecho que la base social del fascismo esta hoy reducicla a pocos grupos parasitari0s, mientras que ciertos dirigentes Io soportan por miedo a lo que vendra después (corno si lo que sucedera después no estuviese destinado a scr siempre mas grave cuanto ma:; dure la dictadura). · Las clases medias, que han sido fascistas por patriotismo, o por estupido orgullo antisocialista y antiohrero, ya no Io son. En cuanto al pueblo en sf, en la meclida que le es posible, no calla su adversi6n, y, en cada caso, ha desprendido de su seno, una avanzada heroica y generosa que ha sacrificado su libertad, y muchas veces la vida, para mantener siempre viva la llama cle la oposici6n. No obstante esto, la dictadura se mantiene y parece desafiar todas las oposiciones y todas las conspiraciones. Lo que ensefia c6mo, cuando se dispone de la fuerza, es muy facil asegurar un orden rig-uroso, en un pafs aterrorizado. La Italia de hoy, ofrece a la clase obrera del munclo entero, un ejemplo terrible de lo oue es la dictadura. La prensa, la tribuna parlam<'ntaria, la escuela clemental, la universidad, la i~lesia, el deporte, todo es monopolizado por el Estado y puesto al servicio cle la clictaclura. Un e.iército de pesquisas y de espias, vigila cada cimlaclano cn la ofic~na, en el club, en' el restoran, por la calle, en la casa, por doquier. Las paredes, corno se decfa durante la guerra, tienen oidos. Basta solo con ser sospechoso cle tibieza para ser echado del trabajo, El Tribuna} especial y la milicia, de quienes se puede dccir son cl mi{ldo armado, ejercen sobre la poblaci6n un verdadero terrorismo. La alternativa que se presenta a cada italiano no fascista, o sea .a la inmcnsa mayorfa de los italianos, es el silencio, o bien la galera y el ~ambre. Pero, si la dictadura dispone de formi<lables me<lios para represi6n, ella es, cn cambio, absolutarnente impotente para re:,;olver las contradicciones politicas y sociales que son la base de la sociedacl italiana. Esta es su condena y esto nos pcrmite considerar el porvenir con serenidad y optin1ismo. Los g-ran<l.es acontecimientos espaiioles de abril del presente aiio - y la historia de toclas las oprcsiones y de todas las tiranfas - ensefian dos cosas: que instaurar una <lictaclura e:; una cosa relativamente facil, diffoil es salir de ella y c11111plirìa evoluci6n en sentido con tra rio, y q 110 llega siempre un momento en cl cual, con el apo_vo de las circunstancias, un pueblo se libera de la tutela de las fucrzas que quieren oprimirlo. Cuando las circunstancia,- sean favorables, también el pueblo italiano bara su revoluci6n, revolucion que preparan todos aquellos que en la cliree], en el exilio, o en e! trabajo ileg-al. man tienen vivas las fuerzas hist6ricas cle oposici6n y de comba te! PIETRO NENNI. La Libertà è il settimanale che ogni antifascista deve leggere se vuole che cessi presto là vergogna d'Italia. Abbonatevi! Sottoscrivete!

RkJQdWJsaXNoZXIy MTExMDY2NQ==