SOCIEDAD CARCELARIA DE ESPAl'IA El •« c!Mvato de celda » limita sensib'lemente el trabajo de la « ley de confidencia », no rinde bastante. En el patio el confidente actua en equipo, posee un margen de manidbra ilimitado, su « rendi,miento » •se contabiliza par multiples formas de actuaci6n. No se trata unicamente de obtener datos concretos, empiricos, directaomente comprometedores. Las misiones que los ·servicios penitenciarios les encomiendan tienen, adema,s, un caracter muc'ho mas sutil: las relaciones, con quien hablan, que temas abordan, par que « registros » se interesan, (« registros », en la ,ierga quiere decir cada una de las especializaciones de un deiincuente), lecturas que utilizan y sdbre todo con quien pasean. Un completo servicio de £c:haje. Un funcionario, generalmente de Cuerpo Tecnico - o Especial - agregado a la Jefiatura de Servicio se encarga de llevar al dia el « dossier » bien nutrido <le cada recluso. Ha!bitualmente es este funcionario quien maneja el equiipo de confiidentes « oficiales », reconocidos por la Direcci6n. El mismo funcionario tiene a la policia al corriente de lo mas substancial de estos «dossiers». Sin el Patio este trabajo policiaco seria muy suiperficial. EL PASEO EN EL PATIO El patio queda conrfig,urado por una serie de imagenes que cubren una amplia gama ide indinaciones humanas, personales y colectivas. La composici6n de las celda·s no siempre permite la reagruipaci6n - 3 o 4 por celda - de reclusos ouyas caracteristcas congenien. Esta composici6n es ,generalmente impiuesta por los Servicios. El Patio, sin embargo, dfrece la posibilidad de escoger. Asi se constituye toda una serie de grupos en raz6n de determinadas actividades: la « ma£a » del front6n, los garitos de ,iuego de da1dos, la « petenca »... De todas estas ima,genes, existe, ·sin embargo, una que representa el « indicativo » mas precioso para el confidente: El Paseo. i Con quien pasea el preso? El Paseo es algo muy intimo, posee, con frecuencia, una dimension privada, interior. En una prisi6n donde ni el cagar puede efectlllarse de otra forma .que en presencia de los consortes de celda, - sal,vo en las hora-s de Patio-, el Paseo adquiere un relieve primordial en la existencia carcelaria del rec'luso. El sentarse en grupo, el llevar una actividad colectiva cual7
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